Suelos a tratar En principio, todo tipo de suelos cohesivos o semi-cohesivos pueden ser tratados con el Sistema CONSOLID y modificados hasta el punto deseado. El grado de estabilización lo determina Vd. de acuerdo a los requerimientos de la construcción.  Todo tipo de suelos cohesivos pueden ser tratados con el Sistema CONSOLID La experiencia en muchos países y con muchos tipos de suelos (desde buenos a muy malos) y en condiciones diferentes confirman que la estabilización se puede conseguir a través del tratamiento con el Sistema CONSOLID. ¿Existe una composición óptima del suelo a tratar? Aquí deben aplicarse los criterios físicos normales de clasificación de suelos, cuánto mejor sea su composición granulada, más alta será la estabilización mecánica del suelo. Una granulación desfavorable o una sobre medida de cierta fracción puede ser mejorada mezclando con otros suelos disponibles en el lugar de modo de alcanzar un mejor estado inicial para la estabilización mecánica. Cuanto mejor sea el punto inicial respecto a la capacidad de soporte, mejor será el efecto del tratamiento con el Sistema CONSOLID con las mismas cantidades de aditivos. La principal efectividad del Sistema CONSOLID apunta a una influencia sobre los finos de un suelo, ya que estos son los principales responsables de su inestabilidad pero después del tratamiento se transforman en ligantes naturales; mientras que la parte gruesa no causa problemas. Dado que se apunta a lograr un suelo más denso, los contenidos de finos (arcilla, sedimento) no deberían ser menores al 20 o 30 % para obtener una estabilidad mecánica satisfactoria. El máximo de material fino, especialmente greda, está dado por la capacidad de mezclado del suelo. En este caso, se requiere agregar material arenoso o grueso para que el suelo sea trabajable. Por el contrario, si se quiere tratar suelos no-cohesivos como la arena, debe agregársele la cantidad necesaria de suelo cohesivo. El suelo a tratar deber ser incorporado siempre en su Proctor óptimo o apenas por encima pero nunca con contenidos de humedad demasiado bajos. El Sistema CONSOLID libera el agua adherida facilitando la compactación, especialmente en suelos que contienen grava o rocas. La compactación va en continuo aumento debido al tránsito, aún si la compactación inicial se ha realizado con humedades demasiado altas. Este efecto de compactación ya no puede ser afectado por el proceso destructivo del suelo que se hincha cuando absorbe agua (sobre todo ante la presencia de heladas); la densidad aumenta constantemente; el efecto del Sistema CONSOLID es permanente. El Sistema CONSOLID puede ser de gran ayuda incluso en el caso de pantanos. Estos suelos contienen a menudo un alto contenido de sedimentos y son extremadamente sensibles a la absorción del agua y por tanto adecuados para el tratamiento con el Sistema CONSOLID. Por supuesto que se deberá elaborar todo un proyecto adecuado a las circunstancias: con su drenaje respectivo, la construcción de un terraplén (al menos un metro por encima del nivel del agua), compactación de la subrasante, etc. Aplicación
La mezcla del suelo con los aditivos del Sistema CONSOLID puede realizarse en el mismo lugar de la aplicación. Sin embargo el Sistema brinda la posibilidad de mezclar los productos y el suelo a tratar en cualquier tipo de planta mezcladora y ser almacenado en espera de su demanda. Para que la aplicación sea totalmente satisfactoria, hay que tener en cuenta la composición del suelo a estabilizar, la mejor composición para un muy buen resultado es: - 1/3 arcilla y limo
- 1/3 arena y pequeña grava
- 1/3 piedras trituradas
- El suelo debe contener, al menos, del 20% al 25% de arcilla
La forma más común de aplicación consiste en el mezclado en el mismo lugar de la construcción. Primero se acostumbra a desmenuzar o remover el terreno a una profundidad de 25 cm y luego se aplica el SOLIDRY. La dosis a aplicar es de 12 a 20 kgs/m3, siendo la estándar de 16 kgs/m3. Se mezcla todo bien hasta obtener una buena homogenización del terreno. Luego se aplica el CONSOLID Liquido también a una profundidad de 25 cm. La dosis a aplicar es de 0,6 a 0,8 litros/m3, siendo la estándar de 0,8 litros/m3. 
Por supuesto que la profundidad real del suelo a tratar de camino en particular, así como el horizonte donde comenzar el tratamiento, serán determinados por las propiedades del suelo, las características del terreno, la tarea que deberá cumplir el camino y la carga esperada de acuerdo a los aspectos estáticos. Debe considerarse que la capacidad de carga de la capa de suelo tratado es mucho más alta que la del suelo no tratado, lo cual puede llevar a ahorros considerables de costos de movimiento de suelo al comparárselo con la profundidad de suelo que debería traer de otro lugar de no utilizarse el tratamiento con el Sistema CONSOLID. El tratamiento de suelos con el Sistema CONSOLID hace al suelo resistente al agua en la medida deseada, sin embargo, el drenaje adecuado para la totalidad de la construcción debe ser provista por los métodos convencionales, de ser requerida, previamente a la construcción de las capas tratadas. 
¿Cómo se aplican los aditivos del Sistema CONSOLID? La aplicación es muy simple y no requiere equipos especiales; cualquier equipo usado en la construcción tradicional de caminos es adecuado. Seguidamente hacemos una lista de los equipos más usados para estas tareas:
Para el escarificado del camino y nivelado: 
Para la aplicación de los aditivos: 
Para la compactación y la mezcla: 
Escarificación y nivelado Primeramente se debe remover y homogeneizar la capa del suelo a tratar a una profanidad de 25 cm, de manera que posteriormente, se pueda lograr una buena mezcla de los aditivos del Sistema CONSOLID. Esta tarea se realiza usualmente con una motoniveladora con escarificador, aunque puede usarse para el escarificado y la homogenización del material un simple arado de cincel y un desterranador de discos de doble acción o cualquier otro tipo, lo cual puede resultar más rápido y eficiente, y por lo tanto más económico. Aplicación de los aditivos Para aplicar los aditivos se puede usar cualquier tipo de auto-tanque o trailer capaz de rociar los productos sobre el terreno ya preparado para el tratamiento. De ser posible se debería trabajar con tanques presurizados, lo cual reduce sustancialmente los tiempos de aplicación en comparación con los tanques rociadores por gravitación. Inmediatamente después de la aplicación de los productos debe procederse al mezclado con la capa de suelo ya que, como ya se ha dicho, un buen mezclado de los aditivos y el suelo es una premisa fundamental para lograr una estabilización efectiva. Compactación y mezcla Luego del mezclado del suelo con los aditivos, debe procederse a la compactación del mismo. Para ello se recomienda el uso de rodillos del tipo de pata de cabra y luego rodillos de goma y otro rodillo compactador. La compactación de suelos deberá ser realizada con contenidos de humedad en su Próctor óptimo o a un nivel apenas superior. Si por cualquier razón la compactación no puede tener lugar inmediatamente después de la aplicación de los productos y el suelo se seca demasiado, la humedad perdida debe ser recuperada usando un regador para luego proceder a la compactación. Si por alguna razón la aplicación o la compactación debieran ser interrumpidas, por ej. por razones climáticas, pueden ser retomadas en cualquier momento en el mismo punto donde fueron interrumpidas cuidando de que se cumplan las condiciones anteriores de humedad. De no requerirse otro tipo de tratamiento opcional se aconseja el tránsito de vehículos de forma inmediata, el cual acentuará gradualmente la compactación del suelo tratado de forma irreversible. Tratamientos opcionales Eventualmente puede requerirse algún tipo de tratamiento superficial, como por ejemplo un riego asfáltico con la incorporación de áridos en suelos que puedan resultar muy resbaladizos debido a un alto contenido de finos arcillosos, o donde el tipo de vehículos que transitan el camino tratado puedan causar una erosión perjudicial.
Mantenimiento El mantenimiento es muy sencillo y barato, ya que no se requieren equipos especiales ni una mano de obra excesiva. Si se trata de la reparación de una pequeña parte del camino, como puede ser un bache, así como partes más extensas, solo basta con remover la tierra de la capa a reparar y volverla a compactar, debiéndose tener en cuenta los contenidos de humedad según lo ya expresado anteriormente. Se recomienda almacenar material ya tratado en el momento de la construcción, de manera tal que, de necesitarse, se puede agregar en el momento de una reparación.
Ensayos de laboratorio y de campo A pesar de que entre el 95 al 98% de los casos las mismas cantidades de aditivos CONSOLID producirán el efecto deseado, se recomienda chequear cada suelo con respecto a su capacidad para ser estabilizado. Visualmente suelos muy similares pueden mostrar propiedades muy diferentes y pueden también reaccionar de maneras muy diferentes. 
El estudio previo del suelo a tratar en base a los requerimientos de diseño es una parte fundamental del Sistema CONSOLID Antes de tratar un camino con el Sistema CONSOLID es necesario determinar el tratamiento más efectivo y económico, para ello se deben tomar muestras representativas a lo largo del camino y analizarlas en un laboratorio de suelos. La información de estos ensayos es básicamente la siguiente: - Contenido de humedad natural y óptima
- Contracción luego del secado
- Densidad y resistencia a la compresión
- Sensibilidad al agua (velocidad de ascenso capilar, hinchado, etc.)
- Comportamiento con los aditivos CONSOLID
En un primer paso se clasifica el suelo y se evalúa su granulación y densidad seca; sobre todo si muestra alguna característica especial, como contenidos de sales o materia orgánica. Gran parte de estas determinaciones se pueden realizar en el lugar según los métodos tradicionales. Luego se producen los ensayos de laboratorio con bloques de suelo no tratado y tratado con las cantidades estándar de aditivos. Los ensayos son similares a los convencionales en este tipo de determinaciones con algunas excepciones donde se deben implementar algunas modificaciones especiales. De forma muy sencilla se puede observar la influencia de la incorporación del CONSOLID Liquido realizando una mezcla de agua con partículas finas a la que se incorpora el aditivo. Claramente se puede observar la aglomeración irreversible de las partículas y que la fase mineral se separa del agua. El engrosamiento de las partículas es visual y físicamente mensurable. Solo después de realizados todos los ensayos necesarios se está en condiciones de dimensionar el camino y determinar el tipo de tratamiento más adecuado. Comportamiento del suelo tratado con el Sistema CONSOLID Los aditivos CONSOLID tienen un enorme impacto sobre la sensibilidad al agua del suelo y la disminuyen al mínimo. De esta forma el suelo pierde en gran medida su comportamiento natural, como puede ser el encogimiento cuando se seca y el hinchazón cuando se humedece, lo cual trae aparejado la pérdida de la compactación del suelo y disgregación que produce la rotura del camino. En general se puede decir que varían prácticamente todos los parámetros característicos del suelo. Una vez compactado y secado lentamente, puede alcanzarse un contenido de humedad permanente que está alrededor del Próctor óptimo o apenas por debajo. Por lo tanto, esto redunda en mayor compactación de la capa tratada que trae consigo una mayor resistencia que se mantiene durante períodos húmedos. Estos valores de humedad van disminuyendo con el paso de vehículos por el camino. Esto puede apreciarse en el gráfico que sigue donde se muestra el comportamiento de un camino tratado con el Sistema CONSOLID en Sudáfrica después de varios meses de uso. |